La Gran Regata del Siglo, Cabo Blanco y El Ñuro

Muchos peruanos han escuchado hablar de Cabo Blanco. Aquel lugar en la costa norte del Perú donde hace décadas ocurrió un evento que aún hoy sigue siendo noticia. También saben que estas playas son un paraíso del surf, donde de vez en cuando, se forma la ola perfecta.

Lo que tal vez sólo sepan unos pocos peruanos es que hablar de Cabo Blanco a nivel mundial es casi una ficción, especialmente para los aficionados a la pesca deportiva de cualquier rincón del planeta. Algo asombroso sucedió cierta vez y nunca más se repetirá. Durante la década de 1950 se capturaron los peces más grandes que jamás se hayan podido pescar con una caña, toda una proeza del hombre y el mar. Ambos tejieron juntos esta leyenda que el mundo deportivo aún aplaude. El impacto de lo que sucedió en Cabo Blanco es tan relevante que el Museo Internacional de la Pesca en Florida (IGFA Museum) recibe a todos sus visitantes mostrándoles, como primer y principal atractivo, lo que sucedió en aquel rincón de nuestra costa ese 4 de agosto de 1953 cuando el Sr. Alfred Glassell se convirtió para siempre en el campeón mundial de la pesca deportiva, capturando un merlín negro de 1,560 libras (poco más de 700 kilos). 

Además de mantener el recuerdo de esta época, única e irrepetible, Cabo Blanco es uno de esos lugares donde la naturaleza y el hombre han decidido hacer algo especial. En esta caleta de pescadores, acunada al pie de un acantilado de 300 metros de altura y bañada por un mar azul como pocos, se mecen al viento 200 veleros artesanales. Ellos son vitales para desarrollar una de las actividades más asombrosas y menos comunes en los océanos del mundo entero: el tradicional arte de la pesca a vela.

Lo maravilloso de esta práctica (en la que a diario participan un centenar de pescadores de Cabo Blanco y de otras caletas vecinas como El Ñuro, Los Órganos, Lobitos, Talara, Negritos) consiste en el uso de veleros impulsados únicamente por el viento de la zona. La pesca se realiza en movimiento, arrastrando varios sedales equipados con “muestras” similares a pequeños calamares de plástico, las mismas que permiten capturar enormes peces como atunes, barracudas y otras especies oceánicas que a menudo sobrepasan los 100 kilos de peso. La gran destreza de estos pescadores, heredadas del arte ancestral de sus padres y abuelos, les permite capturar estas magníficas presas empleando nada más que sus manos y el dominio de los vientos.

Resulta entonces fácil deducir que la famosa novela de Ernest Hemingway, (premio Nobel de Literatura), “El hombre y el mar”, tuvo su mágica inspiración ni más ni menos que en la formidable destreza de los pescadores de Cabo Blanco y sus veleros, a quienes observó día tras día durante su estancia en estas playas.

El arte de la navegación a vela está siendo seriamente amenazado por la industrialización de la pesca, debido a la presencia de las bolicheras a motor y sus interminables redes, que generalmente no respetan la zona de exclusión de 5 millas y abusan indiscriminadamente de esta zona de abundancia marina reservada para la pesca artesanal de consumo humano.

La Regata del Siglo intenta rescatar para siempre al velero peruano de pesca y este arte único de los pescadores norteños, quienes a punta de empeño, esfuerzo y tesón, luchan con peces gigantes hasta cansarlos y capturarlos, usando el viento como único combustible. Toda una proeza, un sistema de pesca sostenible y amigable con el ambiente, seleccionando solo peces adultos y manteniendo un total respeto a su entorno.

Pero si usted creía que los secretos de Cabo Blanco llegaban hasta aquí, está equivocado. La naturaleza nos tiene otras sorpresas. ¿Qué ha producido que en este rincón olvidado del norte de la costa peruana pueda haber tanta belleza junta, y además tanta riqueza marina? Un cabo en el lenguaje universal marino es una “porción de tierra que entra en el mar en el punto donde se encuentran dos corrientes”. Sin lugar a dudas, Cabo Blanco es la capital americana de las corrientes, donde se encuentran, nada más y nada menos que el extremo norte de la inmensa corriente fría de Humboldt con el extremo sur de la cálida corriente Tropical, generando uno de los ecosistemas marinos más ricos y variados del mundo, donde es posible ver prácticamente cualquier especie marina, desde gigantescas ballenas, tiburones, delfines, manta rayas y tortugas hasta los mas variados y preciados peces… y sobre todo, al famoso y esquivo merlín negro.

Recientemente el año pasado se logró que el Mar Pacifico Tropical Peruano entre en la categoría de HOPESPOTS o LUGARES DE ESPERANZA del planeta, dentro de la iniciativa promovida por la mundialmente reconocida oceanógrafa, exploradora y embajadora de los océanos, Dr. Sylvia Earle y su institución Mission Blue, una de las organizaciones de conservación marina más prestigiosas e influenciables del mundo. 

Los Hope Spots o "Lugares de Esperanza" son lugares designados como tal porque reúnen una serie de características importantes y únicas que servirán para proteger las últimas zonas de gran importancia biológica de los océanos.  Por ello, acciones de conservación en esas áreas son de inminente urgencia e importancia.

Este año la Regata del Siglo llevara el lema: TODOS UNIDOS POR EL MAR TROPICAL PERUANO con el fin de promocionar esta región norteña como un paraíso para la pesca, turismo, y para la conservación de la diversidad biológica. Se espera la participación de aproximadamente 30 embarcaciones de las caletas de Cabo Blanco, el Ñuro, Cancas, Lobitos, Talara, entre otras caletas aledañas.

Hoy toda esta aventura puede ser disfrutada por los turistas. Los pescadores de Cabo Blanco han decidido mostrar al mundo sus veleros y su proverbial habilidad. Llegar a este majestuoso paraje es de por sí un atractivo singular. Cabo Blanco es accesible tomando el desvío asfaltado de 10 km que parte de la localidad de El Alto, ubicada a la altura del km 118 de la carretera Sullana-Tumbes. La ruta es sencilla y atraviesa una zona alta del tablazo sechurano para descender luego en medio de vistas espectaculares de la costa del Pacífico, pasando al lado de El Faro, donde se ubica el Mirador de las Corrientes.

Embarcarse en uno de los veleros de Cabo Blanco para navegar silenciosamente con la brisa, al encuentro del Pacífico, es una experiencia inolvidable. Admirar desde el océano el majestuoso paisaje que enmarca la caleta de Cabo Blanco, rodeado por la riqueza marina en el preciso lugar donde las dos corrientes se entrelazan será inolvidable. Y luego enrumbar viento en popa y velas infladas al mismo lugar donde hace pocas décadas ocurrieron esas proezas entre el hombre y el mar para, cordel en mano, probar el arte de la pesca a vela como sólo estos gigantes pescadores del norte del Perú lo saben hacer… Una experiencia que se convertirá en un recuerdo imborrable.

Cabo Blanco es definitivamente un lugar que ofrece mucho para el visitante nacional e internacional. Historia, naturaleza y cultura viva se combinan en un escenario de gran belleza para crear un destino único para pescadores, surfistas y amantes de la vida al aire libre. 

Este jueves 29 de junio, con ocasión de la celebración de la fiesta de San Pedro y San Pablo, Patrono de los pescadores, y conmemorando el reciente centenario de la fundación de Cabo Blanco, se llevará a cabo una exhibición de veleros y chalanas jamás antes vista: la Regata del Siglo. El evento incluirá muchas sorpresas que llegan gracias a los auspiciadores. Juntos lograremos que Cabo Blanco vuelva a ser un atractivo para todo aquel que visita la costa norte. Te esperamos para celebrar por segundo año consecutivo en Cabo Blanco la Regata del Siglo. 

Este año la Regata del Siglo es organizada por el Gremio de Pescadores de Cabo Blanco con el apoyo de la ONG H2Oceanos, y es posible gracias al importante auspicio de la Walton Family Foundation, FISA, San Jacinto, Conservas Maress, Watch Boutique, Inkaterra Asociación, Grupo RPP, Marina Coast Peru, Naturaleza y Cultura Internacional, CLS PERU, además un especial agradecimiento a la Fundación Albatros Media, al Programa para el Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD), a la Dirección General de Capitanías y Guardacostas del Perú (DICAPI), a PromPerú, Viceministerio de Pesca y Acuicultura, al Viceministerio de Turismo, al Ministerio del Ambiente, a la Dirección Regional de la Producción Piura, a la Municipalidad Distrital del Alto

Contacto:

Nina Pardo, Presidenta de H2Océanos

ninapardoperu@gmail.com 

Cel +51 99417 8572

www.h2oceanos.org.pe